El empresario colombiano Alex Saab, presunto testaferro del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, detenido en Cabo Verde (África), apeló el fallo de un juez de Miami que lo califica de prófugo de la justicia de Estados Unidos, donde está acusado de conspirar para lavar dinero.
Miami Mundo / El Nuevo Herald
La defensa de Saab solicita con el nuevo recurso legal “anular la orden que le confiere el estado de fugitivo”, según los documentos de corte.
Saab está detenido en Cabo Verde desde junio de 2020 y su extradición a Estados Unidos fue aprobada el pasado 17 de marzo.
La apelación del fallo
La defensa del colombiano presentó la apelación en Estados Unidos el pasado 1 de abril ante la Corte de Apelaciones del Undécimo Circuito, con sede en Atlanta (Georgia).
En marzo pasado el juez Robert N. Scola, de una corte de Miami donde enfrenta los cargos de conspiración para el lavado de dinero, rechazó una solicitud del colombiano.
La defensa de Saab pedía también responder a las acusaciones de la Fiscalía de Estados Unidos sin pisar el país, lo que también negó el juez Scola.
“Saab Moran no puede afrontar su condición de fugitivo y su acusación hasta que esté físicamente presente en esta jurisdicción (EEUU)”, aseguró entonces el juez.
Alex Saab, que apeló el fallo completo de Scola, está acusado en Estados Unidos de conspirar para lavar dinero.
Así como de lavado de instrumentos financieros, al igual que su mano derecha, Álvaro Enrique Pulido, también colombiano.
“Alex Saab Moran es un fugitivo”, insistió el juez en el fallo de marzo pasado.
Detalló que un acusado es prófugo “si intencionalmente evita el arresto huyendo, escondiéndose o permaneciendo ausente de la jurisdicción”.
Saab está detenido en Cabo Verde en razón de una orden de captura con fines de extradición solicitada por Estados Unidos.
De acuerdo con la acusación, Saab y Pulido lavaron hasta 350 millones de dólares que supuestamente defraudaron a través del sistema de control cambiario en Venezuela.
Según el Departamento de Justicia de EEUU, entre noviembre de 2011 y septiembre de 2015, Saab y Pulido se confabularon con otros individuos para lavar sus ganancias ilícitas.
Así como transferirlas desde Venezuela hasta cuentas bancarias en EEUU, razón por la que Washington dice tener jurisdicción en el caso.